domingo, 8 de diciembre de 2013

PINTANDO EL GUERNICA

No ha sido nunca Picasso, ni lo es, uno de mis pintores preferidos. Su pintura me atrae poco, pero yo no voy a discutir si ha sido uno de los mejores pintores de la historia de la pintura. Si los que entienden dicen que ha sido un pintor excepcional hay que aceptarlo.
Llevaba mucho tiempo sin hacer una copia de algún cuadro de otro pintor. Hoy por hoy prefiero hacer creación propia, pero hace un par de meses, una persona muy querida para mi me pidió que pintase un cuadro. Le pregunté que qué quería que le pintase, y surgió la sorpresa, "quisiera que me pintases  El Guernica de Picasso". ¡Vaya sorpresa!  No puse ningún reparo porque la idea de alguna manera me sedujo. Es un cuadro que me ha atraído siempre, es distinto a los demás, sobre todo por lo que representa. Llevarlo al lienzo resulta complicado y trabajoso, y sobre todo un reto, ya que el original mide aproximadamente 8 metros y yo le he reducido a un 1.20 metros. Eso obliga al utilización de pinceles muy finos por la cantidad de lineas que lleva el dibujo. Quizás una de las cosas que más he valorado, es que pintar El Guernica me ha obligado a estudiarlo y fijarme en los detalles del mismo, algo en lo que nunca me había detenido.
Ya está terminado, y he quedado satisfecho de como ha quedado. Es quizás la pintura que más me ha absorbido nunca, 
He tenido la curiosidad de ir haciéndole fotografías a diario, y este ha sido el resultado:














No hay comentarios:

Publicar un comentario